Escribo esto escuchando todo Pure Heroine de Lorde, tomando Chai Tea a -18 grados.
Siete meses después estoy nuevamente en Chicago, mi segunda ciudad favorita del mundo. Cuando vine por primera vez estaba en pleno verano, calor casi igual o peor que el de Guayaquil; todo lo contrario al frío, nieve y viento que he vivido en esta última semana. Pero este clima congelado y las ocho capas de ropa que me pongo encima han valido la pena, totalmente.
El martes comencé el curso en The French Pastry School llamado “Fundamentals of Macarons and Cookies From Around The World” dirigido por el Chef Joel Reno. Fuimos 11 personas quienes en tres dias aprendimos a hacer cerca de 13 diferentes recetas de Macarons, galletas, mermeladas y glaseados. Entre mis compañeros habían dos chicas de Arabia Saudita quienes empezaron su negocio de galletas llamado Zain’s Cookies en su casa al igual que yo, vendiendo sus productos a través de redes sociales. También compartí con Ellen y su mamá Linda, quienes hornean en su casa y van a empezar un proyecto de videos en los que entrevistan a DJs famosos de Chicago mientras les enseñan alguna receta en la cocina. Se llamará Spin Kitchen y me parece novedoso e interesante de seguir.
Lo más importante de todo fueron las recetas que aprendimos: Raspberry Chocolate Ganache Macarons, Mango-Passion and Yuzu Macarons, Lemon Madeleines, Hazelnut Financiers, Chocolate Diamants, Gingerbread Cookies, Chocolate Chip Cookies (orgullosamente puedo decirles que las de Biscotti son mejores), Roasted Hazelnut Butter Cookies, Linzer Cookies with Raspberry Pepin (mis favoritas), Piped Bourbon Vanilla Sablé Cookies y Black Olive Cookies. De todas estas recetas, cada una más rica que la otra, puedo asegurar que las Linzer fueron mis favoritas, las de aceituna negra fueron una gran y agradable sorpresa, las Madeleines y Financiers son fáciles de hacer y probablemente serán lo nuevo de Biscotti y los Macarons nunca me dejan de sorprender.
Lo más interesante y valioso de estas clases es aprender nuevas técnicas, metodos de cocción, uso de equipos, manejo de tiempos y temperaturas, empaques, decoración y el uso de nuevos ingredientes.
Al final del curso salí con unas 200 galletas, nuevas amistades, mucho conocimiento y bastante inspiración para Biscotti Galletas.
Ha sido una experiencia increíble y puedo confirmar después de esto que hacer galletas para ustedes es lo que me hace feliz. Como dijo Julia Child: “Until I discovered cooking, I was never really interested in anything”.
Les comparto algunas fotos de estas clases y la próxima semana les contaré mi experiencia en el siguiente curso “All Things Chocolate”.
Prueba superada. Gracias a mis amigas que me convencieron de tomar esta decisión y aumentar un par de diplomas más a la vida de Biscotti.
Nos vemos pronto,
Mj
Las manos que hacen Biscotti Galletas Artesanales.
