De lunes a viernes, si haces tu pedido hasta las 13h00, se entregará el mismo día.

Carrito

Salvaje Bakery En Buenos Aires

Salvaje Bakery
Salvaje Bakery

Una vez más escogí Buenos Aires como destino de mis vacaciones para este nuevo año. Es la tercera vez que la visito y podría regresar mil veces más. Hay tanto que hacer, tanto que ver y tanto que comer (y tan rico) que uno nunca se cansa, uno nunca se aburre en la capital argentina. Cuando visité Buenos Aires el año pasado con mis amigos, pudimos recorrer algunos restaurantes, cafeterías y bares que luego se los recomendé en este blog. En estas vacaciones viajé sola así que tuve mucho más tiempo libre para caminar, conocer y por supuesto, comer.
Mi primera parada fue: Salvaje Bakery. Los tenía vistos en Instagram hace meses y de ver la fotos se me hacía agua la boca, así que ni bien llegué, mi primer desayuno fue ahí. Me gustó tanto que regresé y mi último desayuno en Buenos Aires también fue en Salvaje y ahí  tuve la oportunidad de conversar con Germán Torres, su creador.
Salvaje Bakery es relativamente nuevo, nació en Diciembre de 2016, pero si pasas por ahí cualquier día a cualquier hora, vas a ver gente en el lugar disfrutando los panes deliciosos, algún postre, tarta o tomándose un café. Será nuevo, pero ya tiene su clientela. La idea nació entre tres amigos. Encontraron un galpón en la calle Dorrego y lo adecuaron para convertirlo en esta panadería/cafetería con decoración precisa en tonos blanco y negro, música y una cocina abierta donde puedes ver cómo los chicos preparan la producción diaria, todo fresquito y limitado.
La base y clave de Salvaje es la Masa Madre, es decir fermentación natural, lo que hace que el sabor, aroma, textura y calidad de sus panes sean únicos, distintivos y característicos del lugar.

Salvaje Bakery
Salvaje Bakery


Germán es un apasionado por lo que hace, y como siempre les digo a mi estas personas me encantan porque te transmiten el amor por su trabajo inmediatamente, y ese es el secreto para lograr que las cosas sean realmente buenas y los demás puedan distinguirlo y apreciarlo. Hay un detallado cuidado en cada partecita de Salvaje, desde los cuadros, lámparas, vajilla, mesas, sillas y hasta en la música que escuchas mientras estás ahí disfrutando tus panes, tartas, buns, sánduches, ensaladas, cafecitos, vinos o cócteles.

En mi dos visitas pude probar las medialunas (que me encantaron porque no son tan empalagosas como las que encuentras en cualquier panadería argentina), una tarta de kale y zanahoria con ensaladita, un Morning Bun de naranja (mi favorito definitivamente) y en las dos ocasiones pedí Latte, powered by La Marzocco.
Salvaje Bakery es de esos lugares que se quedan en mi corazón y memoria para siempre, como un referente de que cuando haces las cosas con pasión y esfuerzo, los resultados son increíbles.

Cuando estén en Buenos Aires pasen por ahí ya sea en el desayuno, brunch, almuerzo o a la noche que tienen cócteles y música en vivo.
En el próximo post les cuento más sobre mi viaje y los demás lugares deliciosos que visité en esta, una de mis ciudades favoritas del mundo.
Un abrazo, me encanta estar de regreso y seguir trabajando para ustedes.
P.D.: Algunas fotos son mías y otras las saqué del Instagram de Salvaje.
MJ

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Buscar recetas

Buscar recetas
Cerrar